Decía don Miguel Delibes, del que esta semana se cumplieron 5 años de su muerte, que "un pueblo sin literatura es un pueblo mudo". Yo iría más allá que él y diría que es un pueblo sin Alma, incapaz de pensar por si mismo.
En la actualidad, España, un país que ha dado a luz a los más grandes literatos de la historia, es un país en el que no es que no se lea, sino en el que no se estudian a esos hombres y mujeres que con una pluma como arma, fueron capaces de conquistar a generaciones enteras y pueblos de sitios muy distantes entre si, pero que tenían algo en común: su pasión por la literatura.
Desde la sociedad se tiene que hacer una reivindicación seria de aquellos grandes de la literatura. Para saber de todo, hay que volver a los orígenes y que mejor forma de hacerlo que desde las escuelas e institutos, así como desde la familia, se fomente el amor a la lectura y a los grandes genios de la palabra escrita. Porque un pueblo donde se lee es mucho más sabio ¿Por que creen que a lo largo de la historia dictadores y tiranos han fomentado la quema de libros?
Hay multitud de tesoros tanto materiales como inmateriales. Los libros son de los pocos que son ambas cosas, puesto que se pueden tocar, sumergiendote de lleno en sus páginas, y dejarte una enseñanza valiosa para el día a día. Cada vez que alguien ojea un libro, se adentra en sus paginas, el Alma de ese libro se hace cada vez más fuerte. La literatura debe formar parte de nuestra vida tanto a niveles académicos como sociales. Los libros están ahí; sólo hace falta que alguien los abra ¿A qué esperas?
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