El ángel de la muerte

"¿Quién es más loco: el loco o el que sigue al loco?" Esta simple pregunta cabria preguntárnosla cuando vemos como a lo largo de la historia determinados elementos son capaces de cometer atrocidades en base a las corruptas ideas de uno o varios lunáticos, que tanto mal ha hecho para la pervivencia de la especie humana y del mundo. Uno de los hombres que no dudo en seguir a un loco fue Josef Mengele. 

Mengele no era un hombre cualquiera. Obtuvo un doctorado en antropología y medicina por la Universidad de Múnich antes de caer rendido ante las ideas y palabreria vacia de un miserable como Adolf Hitler. Fruto de ésto, se unió al partido nazi en 1927. 

Mengele, un médico brillantisimo, había caído en las redes del nazismo hasta el punto de hacer suya toda la miseria, que éste desprendia. La obsesión de Mengele, al igual que todos los nazis, era demostrar la inferioridad de las razas con respecto a la supuesta raza aria. 

Al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, fue asignado como oficial médico de batallón y posteriormente se trasladaria a Auschwitz, donde realizaría experimentos atroces, que demostraban que su fanatismo era muy superior a su raciocinio como médico. Muchos de esos experimentos sin carácter científico eran sobre gemelos. Auténticas carnicerías de las que Mengele se sentía orgulloso, puesto que creía cumplir un deber para con Alemania. Sus actuaciones asesinas le llevaron a tener el apelativo de "El ángel de la muerte", algo que no era más que una realidad, puesto que a sus experimentos asesinos, se unía a que también formó parte del equipo médico que seleccionaba a los presos recién llegados al campo de concentración, distinguiendo entre los aptos para el trabajo y los que no lo eran, los cuales eran enviados de forma inmediata para ser asesinados en las cámaras de gas. Mengele abandonó Auschwitz poco antes de la llegada del ejército rojo, librándose de lo que hubiera sido su juicio y ejecución. De hecho, nunca fue atrapado. 

Muchas leyendas se contaron con respecto a su figura, pero lo cierto es que Mengele se convirtió en uno de los muchos nazis que vivieron más o menos bien en países sudamericanos. Murió ahogado mientras nadaba en una playa brasileña en 1979, siendo enterrado bajo nombre falso. Finalmente se confirmaría que aquellos restos eran los de Mengele. Los restos de un asesino miserable, que tanto daño hizo a miles de seres humanos, formando parte de la ola de corrupción y miseria humana que trajeron los nazis a Alemania y Europa.

PD: No he puesto ninguna de las fotos de los experimentos de ese miserable porque no he podido soportarlas y dañan la sensibilidad de cualquiera.