Clásicos Inmortales: Vértigo

Una magnífica de Hitchcock en la que el suspense adquiere el grado de tensión y es que el espectador se convierte en casi un compañero más del detective interpretado por James Stewart, que se ve involucrado en una historia truculenta en un momento terrible en el que se ha tenido que irse de la policía por padecer acrofobia (miedo a las alturas).

Hay una persecusión por los tejados de la ciudad de San Francisco. Un críminal huye por ellos, siendo perseguido por la policía dirigida por el Detective Scottie Ferguson (James Stewart). En una de éstas Ferguson siente un tremendo vértigo, que a punto esta de hacerle caer. Tras agarrarse a un hierro, un policia le ofrece ayuda, pero Ferguson no consigue asirse a su mano y dicho policía resbala, cayendo al vacío. 

Scottie ante el precipicio

Ferguson se ve obligado a retirarse por su acrofobia y  vértigo e inaugura una agencia de información. A pesar de algún progreso, sigue padeciendo de vértigo. Un día recibe una llamada de Gavin Elster (Tom Helmore), un antiguo compañero de estudios, que le contrata para vigilar discretamente a su esposa Madeleine (Kim Novak). Y es que Madeleine parece estar loca: sufre de melancolía y parece estar poseída por el espíritu de su bisabuela, Carlota Valdés, fallecida hace cien años antes, con ánimo de matarla. Scottie la sigue y observa por distintos lugares de la ciudad: tiendas ente los que se encuentran cementerios, hoteles y museos, mientras empieza a investigar la trágica historia de Carlota. Descubre que Carlota se suicido con 26 años, que es la misma edad que tiene Madeleine.

Siguiendo a Madeleine

En una de esas persecusiones, Madeleine intenta suicidarse, tirándose frente al Golden Gate, pero Scottie la salva, llevándola a su casa. Ella parece no recordar nada de lo que ha sucedido cuando comienza a departir con él, que continuara siguiéndola. Scottie se dará cuenta de que cada vez más se siente más atraído por ella. Scottie intenta penetrar en la mente de la joven para saber el motivo de su actuación, ya que parece estar poseída por el espíritu de Carlota.

Fruto de esas pesquisas, de entre sus muchos encuentros, acaban frente a un campanario y ella acaba corriendo. Scottie la persigue para evitar que haga una locura. Mientras esta subiendo, el detective parece no poder avanzar más fruto de su miedo a las alturas. Scottie saca fuerzas de flaqueza y consigue llegar a lo alto del campanario, pero sin poder evitar ver caer un cuerpo. Presumiblemente el de Madeleine.

Ferguson, sintiéndose culpable por lo que no pudo evitar, debe ser internado en un psiquiátrico víctima de una profunda depresión. Cuando sale va a los mismos sitios en los que había estado con Madeleine y en ese momento cuando se encuentra con una chica llamada Judy. No sabe que fingió ser Madeleine. Ferguson entabla con ella una relación que se basa en obligarla  a que adopte la personalidad de la difunta, vistiéndose igual e incluso teniendo el mismo pelo que Madeleine.

La actitud de Ferguson esta muy próxima a la necrofilia y es que ve a Madeleine en esa chica. Ferguson se dará cuenta de que Judy anteriormente se hizo pasar por Madeleine debido a un collar de Carlota Valdéz que se pone una noche. La realidad de la que se hacía llamar como Madeleine será muy dura. En realidad, la chica se llama Judy Barton y es una impostora. Ésta se hacía pasar por Madeleine, en complicidad con Gavin Elster, para crear una coartada para que Gavin asesinara a la verdadera Madeleine. Judy subió al campanario como Madeleine y allí la esperaba escondido el propio Elster con el "cadáver" de su esposa, que arrojó desde el campanario con el cuello roto, sabiendo que Ferguson, debido a su acrofobia, no podría subir hasta allí para salvarla. De esta forma, Scottie corroboraría la historia del suicidio.

Ferguson quiere comprobarlo, haciéndola confesar, y para ello la lleva a la misión y la obliga a subir al campanario de la Iglesia, donde había simulado el suicidio. Él la obliga a subir al campanario, perdiendo la acrofobia. Pero no es lo único que pierde. Madeleine, debido a un susto, tropieza y cae, matándose en el acto. Ferguson, ante su horror, pierde (y esta vez de forma definitiva) a la mujer que amaba por segunda vez.

Aunque esta obra pasa por ser una de las mejores del maestro Hitchcock, hay que decir que debido a su excesivo simbolismo, no tuvo éxito en taquilla. Hay dos partes diferenciadas: la primera trata sobre la investigación y enamoramiento de un Scottie que no puede evitar el presumible suicidio de la joven y la segunda en la que un torturado Scottie se encuentra a la impostora y es la obsesión que siente hacía la fallecida lo que hace que intente convertirla en su amor perdido (la relación sexual que siente hacía la muerta es una evidencia y se hace patente, personificandolo en la chica a la que supuestamente acaba de conocer), momento en el que da cuenta de la oscura verdad. Una de las grandes películas del genio ingles con unos movimientos de cámara espectaculares pare reflejar la angustia de Scottie cuando mira al vacío (zoom) y unas actuaciones brillantisismas con una mujer enigmatica intepretada por Kim Novak y un investigador interpretado por James Stewart en una de sus últimas grandes interpretaciones. A destacar, los magníficos títulos de crédito (cortesía de Saul Brass) y un final tan oscuro como gran parte de la película.

Ficha

Dirección	Alfred Hitchcock
Producción	Alfred Hitchcock
Guión	Alec Coppel Samuel A. Taylor Obra:  Pierre Boileau y Thomas Narcejac
Música	Bernard Herrmann
Sonido	George Dutton
Maquillaje	Wally Westmore
Fotografía	Robert Burks
Montaje	George Tomasini
Vestuario	Edith Head
Efectos especiales	Farciot Edouart John P. Fulton W. Wallace Kelley

 
Otros datos

País	Estados Unidos
Año	1958
Género	Suspense, Drama
Duración	128’

 
Protagonistas

Actor	Personaje
James Stewart	Detective John 'Scottie' Ferguson
Kim Novak	Madeleine Elster/Judy Barton
Tom Helmore	Gavin Elster
Barbara Bel Geddes	Midge Wood
Henry Jones	Juez de instrucción
Raymond Bailey	Médico de Scottie

 
Premios
Festival de San Sebastián

Categoría	Persona
Mejor Director	Alfred Hitchcock (ex-aequo)
Mejor Actor	James Stewart (ex-aequo)

Intro

Salto desde el campanario

La pesadilla