Recuerdo que conocí tanto al Chavo del Ocho como al Chapulín Colorado en la 2. Ya había pasado mucho tiempo desde que la serie fuera emitida por primera vez en su tierra natal, Méjico, sin embargo muchos chicos de mi generación lo vimos y nos reíamos con sus andanzas, lo que demuestra hasta que punto el humor ofrecido por Roberto Gómez Bolaños "Chespirito" era universal porque era capaz de hacer reír a generaciones diferentes.
¿Cómo no recordar sus frases celebres como "Siganme los buenos" o "Fue sin querer queriendo"? Lo cierto es que "Chespirito" era capaz de sacar una carcajada de lo más mínimo y estamos hablando de personajes como el Chavo del Ocho que vivía en la más absoluta pobreza.
El 28 del mes pasado fallecía en su tierra natal. Siempre nos quedara en el recuerdo por sus grandes y queridos personajes que nos hicieron reír a tantos y tantos a pesar del tiempo. Y ahora sólo me queda decir: "Siganme los buenos".
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