El que los que se dicen españoles pongan en cuestión al Estado Nacional no es nada nuevo, pero que una y otra vez pongan en entredicho la utilización del castellano como lengua vehicular es demasiado.
Estos días ha habido determinadas manifestaciones en Baleares en relación a que el Gobierno de la región quiere fomentar el trilinguismo (español, catalán e inglés), algo que algunas mentes poco claras no les parece bien porque para esos personajes el que tiene que prevalecer el catalán.
Esta situación que se esta dando en las islas mediterraneas, es algo que se lleva dando en Cataluña todos estos años: niños que no pueden estudiar en castellano, exigencia del catalán a los funcionarios, etc. Cosas que harían enrojecernos de la vergueza que produce que haya gente que quiera imponer un idioma, con todos mis respetos, hablado por una infima parte de la población mundial, frente a otro, el castellano, el cual es uno de los idiomas más hablados y estudiados del mundo. El que actua de esa forma reaccionaria y vil, propia de las dictaduras que lo quieren imponer poco, sólo tiene un nombre: cateto.
Y lo que es peor que partidos como el PSOE que no es obrero, tampoco es español porque constantemente esta defendiendo esas actuaciones miserables por parte de unos nacionalistas a los que se les ha dado el oro y el modo, dándoles lo que pedían y, claro para que no se enfanden, sin rechistar. El tema del idioma es algo que ni se da en países que tienen más de un idioma. El ejemplo claro es Suiza. Es un país que tiene tres idiomas oficiales en función de la zona en que vivas (francés, alemán e italiano), además de ser un país federal y, sin embargo, no tiene problemas en cuanto a administración del territorio y todos los suizos se sienten muy orgullosos de serlo.
Yo me siento muy orgulloso de ser español, algo que parece que no lo sienten determinados sujetos porque no esta de moda o, en el peor de los casos, piensan que sentirse español es lo mismo que ser fascista (¿?). Que haya cuatro gatos nacionalistas me preocupa, pero que haya personas que siendo españolas no defiendan a su Patria y con ella a su cultura, su lengua e historia, es de una bajeza moral tremenda que sólo se explica desde el miedo, desde la errónea visión del mundo y la historia (algunos dicen que portar la bandera española es franquista) o, en el caso del político, para conseguir el poder, aunque sea vendiéndole el alma a los nacionalistas, los cuales son unos traidores.
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