Fanaticos en el Congreso

Cada vez que veo una parte de alguna sesión en el Congreso de los Diputados, no puedo sentir más vergüenza ante la falta de capacidad intelectual y de oratoria por parte de algunos de nuestros representantes. 

Ayer vimos una muestra aún peor de lo que digo. Vimos al energumeno Tardà de ERC cargar e insultar al Ministro de Educación, tachandolo de fanático y mala persona por decir éste que el catalán se encuentra en la misma situación que en otras épocas históricas como el mismo franquismo. 

Tiene gracia que unos señores que han hecho del idioma un arma arrojadiza, se atreva a acusar de fanáticos a los que no piensan como el. Dejando de lado que el tal Tardà, al que podríamos llamar retardádo, no es más que un ignorante que desconoce la historia de su propia tierra y, sí la conoce, la esconde para tener la excusa perfecta para tachar a todo el mundo de fascista. Para colmo se le unieron en su protesta los del partido comunista, que, como todo el mundo sabe, son la panacea de lo "democrático". 

Llamativo es que hablen de persecución del franquismo a Cataluña cuando ésta fue una de las regiones más prosperas y favorecidas por el régimen, que tenía la complicidad de muchos que ahora reniegan de España e incluso, algunos de ellos son diputados y, por lo tanto, siguen cobrando del Estado Español al que insultan siempre que pueden.

La Vanguardia: de franquista a independentista

Es innegable que esta Democracia (la española) ha permitido que determinados mamarrachos se atrevan a mostrar banderas ilegales o a insultar. Sólo así demuestra su falta de capacidad democrática. No todo vale en política. Y puedo estar a favor de la opinión de un socialista o de un conservador, pero siempre desde el respeto a mis ideas. Para insultar, mejor que se vayan a una taberna y no a donde, a Dios gracias, reside la Soberanía del Pueblo Español. .