Tengo que reconocer que dentro de los musicales tengo una gran predilección por Gene Kelly. Grandes hubo como Fred Astaire, pero Kelly era mucho Kelly. Gran cantante y bailarín que se tomaba su trabajo en serio. Quizá demasiado en serio para algunos.
Y es que sobre Kelly siempre corrió ese rumor de que era demasiado exigente no sólo con el mismo, sino con los que le rodeaban. U caso paradigmático lo tenemos en "Cantanto Bajo la Lluvia" donde el mismo llego a pedir perdón por su demasiado ensimismamiento (llamemoslo así) a la hora de rodar una toma perfecta. La propia Debbie Reynolds llego a terminar la famosa toma de "Good Morning" con los pies sangrando.
Sin embargo, precisamente gracias a su capacidad de perfección, llevo a los musicales a la posibilidad hasta ese momento remota de ser mucho más que películas de entretenimiento y poco más. Aún hoy las coreografías de Kelly son únicas y han servido como fuente de inspiración ha muchos que han intentado abrirse paso en el mundo de la canción.
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| Con Barbra Streisand en el rodaje de Hello, Dolly! |
Kelly no sólo hizo musicales, pero es en éstos donde alcanzo la fama mundial. A destacar la que podríamos llamar su trilogía de oro con "Un día en Nueva York" (con el gran Frank Sinatra), "Un Americano en París" y la mencionada "Cantando bajo la Lluvia". Tres auténticas joyas de los musicales.
Tal día como hoy fallecio este grande de la interpretación musical. Aquel que nos hizo ver que era posible cantar bajo la lluvia.
Good Morning
New York, New York
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