sábado, 7 de junio de 2014

La república del absurdo

Resulta como poco llamativo todas las concentraciones a favor de un supuesto Estado republicano, tras la abdicación del Rey. Me resulta llamativo que esa gente que tanto crítica el modelo de Estado pretenda dar lecciones de Democracia cuando piden un referéndum a espaldas del pueblo (a sólo 0,2% de españoles le preocupa la Monarquía), sino que defienden no el advenimiento de un sistema republicano, sino la vuelta a un modelo, que separo a los españoles, llevando al país al desastre de una guerra civil no en el 36, sino mucho antes con asesinatos políticos, quema de iglesias y revoluciones como la del 34, que tenían como único objetivo acabar con la propia república.


Yo no quiero un sistema o modelo en el que España este secuestrada por una ideología, la cual no admite que la derecha pueda gobernar hasta el punto de hacer barricadas en las calles. España ha avanzado lo suficiente para volver a los dramas del pasado, aquellos que enfrentaron a un grupo de españoles contra otros. 
Ellos no quieren una Democracia. Quieren imponer su propia ideología, que se acerca más a Estados gobernados por corruptos como el desgraciado caso de Venezuela antes de mirar hacía un futuro esperanzador. 
Nosotros como españoles y defensores de la Democracia no podemos tolerar el atentado que algunos quieren perpetrar no contra la Monarquía, sino contra el propio sistema democrático. Gente que pone como ejemplo de buena conducta Estados totalitarios como Cuba o Venezuela debe ser desterrada de la vida política. No me vale aquello de que sí consiguen un millón de votos en las europeas. Eso es una falacia, puesto que no todas las ideologías o actitudes deben ser consideradas legitimas independientemente de los votos. Paso con el nazismo en Alemania y sigue pasando en España donde la extrema izquierda quiere imponer sus ideas pasando por encima del individuo.

Chavez y Maduro: enemigos del pueblo venezolano

No podemos, ni debemos caer en el absurdo al que nos quieren llevar personajes que se han hecho famosos por ir a programas de televisión, que no destacan precisamente por su pluralismo político. Sí tanto les gusta el modelo bolivariano, que vayan a Venezuela donde se juzga a lideres opositores simplemente por no estar de acuerdo con la imposición realizada por golpistas como Chavez o estúpidos como Maduro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario