Fue uno de los primeros enemigos de nuestro lanzarredes favoritos y quizás uno de los más llamativos. El buitre, un tipo disfrazado con un traje verde, cuyas alas conectadas a un motor, le permiten volar y cometer atracos. Precisamente, por culpa de este personaje Spiderman, a punto estuvo de retirarse debido a una derrota, pero Spidey... ¡Es mucho Spidey!
El buitre original (y al que me voy a referir) se llamaba Adrian Toomes, un-ingeniero que fue socio de un hombre llamado Gregory Bestman, el cual manejaba las finanzas, mientras que Toomes manejaba las invenciones. Un
día, después de crear un arnés de vuelo (lo que daría pié al futuro buitre), un Toomes, logicamente entusiasmado, corrió a
la oficina de Bestman para compartir la feliz noticia, pero no lo vio en su despacho, pero si descubrió que éste había
malversado los fondos y que él no tenía ningún recurso legal, lo que
significa que había perdido su trabajo, siendo literalmente estafado por quien creía su colega.
Toomes, evidentemente enfurecido, destrozó el negocio (años después intentaría vengarse de Bestman),
descubriendo que el arnés le daba fuerza sobrehumana, decidiendo dedicarse al crimen bajo el nombre del buitre.
Lo demás es historia. Infinidad de veces se encontraron el arácnido y Toomes, sobrevolando los cielos de Nueva York, luchando por ver quien era más fuerte: la araña o el buitre. Precisamente, gracias al primer encuentro con el buitre, Peter Parker pudo vender las fotos de si mismo luchando con el villano para venderselas a Jameson y que éste lo contratara como fotografo de su periodico. Ahí comenzó su duelo con el terrible buitre.
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