Es indudable que "¿Teléfono Rojo? Volamos hacia Moscú" es una de las grandes películas de Stanley Kubrick con un humor negro que esconde el drama de una guerra nuclear utilizando como base la confrontación de los dos bloques existentes en aquellos años, pero ¿Sabían que el final de dicha película iba a ser distinto?
Sin contar mucho del argumento (para eso vean mi reseña de la misma), la película acabaría ni más ni menos que con una batalla de tartas entre altos mandatarios que ante la imposibilidad de llegar a acuerdos y la inminencia del estallido de una guerra nuclear, se verían obligados a utilizar un recurso tan primitivo, pero utilizado en las clásicas comedias splatstick (muy habituales en el cine mudo), perdiendo toda la formalidad posible.
Imágenes sobre el lanzamiento de tartas existen, aunque no parece que no existen filmaciones de la misma, pudiéndose ser que fueran eliminadas. Lo que si sabemos es que fue la idea inicial de Kubrick. Entonces ¿Por qué la rechazó?
No se sabe, pero parece evidente que el tono desenfadado de una batalla de tartas no encajaba con el tono de la película, que aún siendo una comedia, era un tipo de humor muy diferente. Estamos ante un caso de un final alternativo que (por suerte o por desgracia) nunca llegó a darse.
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