Hijo de campesinos judíos procedentes de Moscú, su nombre real es Issur Danielovitch Demsky, pero sería en los 40 cuando al entrar de lleno en el mundo de la actuación cuando utilizaría el nombre por el que todos lo conoceriamos: Kirk Douglas.
Podría citar infinidad de interpretaciones donde literalmente se comía la pantalla ("El Ídolo de Barro", "El Gran Carnaval", "Cautivos del Mal", "Senderos de Gloria", "El Loco del Pelo Rojo", ...), pero me quedaría corto puesto que si algo garantizaba Douglas era una expresividad que lo llevó a las altas cotas de un mundo como Hollywood, que sin embargo, para no variar, le negó el Oscar como hizo con otras grandes estrellas del celuloide, recibiendo tan solo un premio honorífico.
Lana Turner y Kirk Douglas |
Hablar de Douglas es hacer referencia a la época dorada del cine y es que Kirk era de esos actores que encarnaba al cine en su máxima expresión. Muy pronto su hijo Michael seguiría sus pasos; otro Douglas en acción.
Por eso siempre me gusta recordar la mítica escena de "Espartaco" donde todos a una, ante las amenazas de crucifixión, decían aquello de "Yo soy Espartaco". Creo que a más de uno se le escaparia el nombre de Kirk Douglas y es que si declararse a favor de Espartaco, era estar a favor de la Libertad; declararse a favor de Kirk Douglas, es estar a favor del buen cine.
Tributo
Yo soy Espartaco
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