sábado, 1 de abril de 2017

Olivia de Havilland... y su destino

Con más de 100 años (hasta el momento que estoy escribiendo este post), Olivia de Havilland es de las pocas supervivientes que quedan de ese Hollywood clásico que, a pesar de los años, vive en el corazón de muchos amantes del cine. Olivia, Olivia...


Olivia estaba destinada a ser una de las grandes del cine, algo casí dispuesto por su madre, Lillian Fontaine, actriz de escaso recorrido, que es probable que influyera en el profundo desprecio mutuo que sentían las hermanas Fontaine, Olivia y Joan, dada la competencia que fomentó entre ambas. El reconocido Max Reinhardt se fijó en Olivia para el teatro y desde allí daría el salto a la gran pantalla, pero...

Hermanas... y rivales

En sus inicios estuvo destinada a ser la dama del aventurero (algo que la llevó años después a litigar con la Warner, pero esa es una desagradable historia), un rol bastante secundario en contraposición al protagonista que llamativamente siempre fue Errol Flynn. Funto a Flynn rodó hasta siete películas, destacando muy especialmente en "Robin de los Bosques", "El Capitán Blood" y "Murieron con las Botas Puestas" con papeles muy solidos, que la consolidaron como una gran actriz dramática. 


Mientras Joan, su hermana y rival, no sólo comenzaba a despuntar, sino que ganaba su primer y único Oscar a la Mejor Actriz Principal por "Sospecha" cuando ella todavía era una mera actriz secundaria (La mala relación existente entre las dos hermanas pudo apreciarse en la gala cuando Joan rechazó las felicitaciones de Olivia al subir a recoger su Premio), aunque, aparte de sus papeles con Flynn, ganó gran notoriedad gracias a su papel de Melania Hamilton en "Lo que el Viento se Llevó" (en mi opinión una de sus mejores interpretaciones). Pero tarde o temprano le llegaría su hora de despuntar como actriz principal... y ¡Lo logro!


Así obtuvo dos Oscars a la Mejor Actriz Principal (1947 y 1949) por sus actuaciones en "La vida íntima de Julia Norris" y "La heredera", siendo esta última una de esas interpretaciones que calan en todo cinéfilo, dejando casi en segundo plano al protagonista masculino, el cual era un jovencísimo Montgomery Clift.


Años, muchos años, han pasado desde que dejó la primera linea y aún entre sus recuerdos queda ese eco permanente de su éxito; un destino que se labró en aquellos años 40 (especialmente) que la convirtieron en una de las grandes de la interpretación de su generación. Olivia, Olivia...

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