Lo que les pasa a los socialistas catalanes es sólo una muestra del estado en que se encuentran en el resto de España. Una de las cosas (la única me atrevería a decir) con la que realmente estaba de acuerdo con la ideología socialista es su ferviente antinacionalismo (sus luchas con el nacionalismo vasco eran tremendas).
Pues resulta que ahora hay socialistas que se declaran nacionalistas o por lo menos no ven con malo ojo que se hagan consultas o se hable mal del país del que viven muchos ciudadanos de España, incluido los catalanes.
Uno podrá equivocarse en us apreciaciones o no coincidir en opiniones con todo el mundo (lo cual es lógico), pero uno no puede estar a favor y en contra de lo mismo. Si eres nacionalista, confirmalo, si no lo eres, no actúes como tal. El problema del socialismo actual en España es que no quiere vivir acomplejado en Cataluña como el PP o Ciudadanos y que por las aceras los llamen españolistas (ni que eso fuera un insulto) y por eso actuan de esa forma. De vez en cuando hablan de federalismo, otras veces de la familia real, pero el caso es desviar la atención y que sean aceptados por determinados personajes que lo único que hacen es quejarse de España, pero después aceptan el dinero que les da.
Uno se puede considerar catalán y español, perfectamente y no pasa nada. Y si alguien tiene un problema, que se aguante. El problema es que hay gente que parece vivir acomplejada en los sitios donde desgraciadamente el nacionalismo tiene mucho poder. Un dirigente tiene que saber que si esta ocupando un puesto en un Congreso o Parlamento es que la mayoría sus votantes le han elegido porque supuestamente coincide con su ideología.
Y no vale eso de "si no puedes con ellos, unete a ellos" porque en política eso se paga y los votantes, algunos, quieren que sus políticos sean tajantes y actúen en función de sus creencias y conveniencias. Y ante dictaduras, disfrazadas en Democracia como es el nacionalismo se ha de ser tajante y por encima de todo estar en defensa de España. En defensa de España y de todos sus ciudadanos. Los nacionalismos sólo son una parte del todo. Es por eso que defender a España es defender a todas las regiones que la conforman. Es tan malo hablar mal de España, como hablar mal de Cataluña porque los dirigentes catalanes no representan en su mayoría a la población de Cataluña, aunque ellos lo digan (algo muy propio de Cataluña).
Ahora que surgen cada vez nuevos temas sobre Cataluña o más recientemente de Gibraltar hemos de estar cada vez más unidos y actuar en función de lo que nos diga el sentido común. Yo siempre aplaudiré a un Gobierno que defienda los intereses de España, algo que desgraciadamente no se ha dado muchas veces, en especial con el Gobierno anterior que facilito el ascenso nacionalista, así como que determinada colonia actuase por su cuenta. Por una vez, desearía que los socialistas actuaran por el interés de España y no por intereses partidistas (Gibraltar) o por complejos absurdos (Cataluña).
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