lunes, 4 de marzo de 2019

¿Dónde están?

¿Se acuerdan la cantidad de personas (supuestamente feministas) que salieron a la calle con la sentencia de la manada de San Fermin? Pues un año después y con otro caso que se ha dado a conocer como el de la manada de Sabadell ha habido un silencio absoluto; un silencio que resulta ruidoso en tanto en cuanto el juez los dejo en libertad provisional y que uno de ellos se ha fugado. No voy a entrar en eso de que son extranjeros legales o ilegales o si tienen o no un expediente de expulsión. Un presunto violador es una cosa seria que no entiende de nacionalidades, pero yo que no veo diferencias más allá de una acusación por violación, me doy cuenta de que otros (u otras) parecen que sí ven diferencias en función de la nacionalidad del individuo que ha sido acusado de violación, incluso en la cobertura que dan los medios de nota muchisimo. 
Hace un tiempo leí una noticia de que en un país nordico (me reservo el nombre) desde la propia policia se había ocultado a la opinión pública la violación por parte de refugiados porque, según ellos, no querían crear un estado de alarma que llevase a la xenofobia (Alemania y Suecia ha tenido serios problemas con casos de violaciones por parte de refugiados). ¡Es un escandalo!
Resulta exasperante darse cuenta de que como el presunto violador sea natural del país hay que hacer juicios de valor y manifestaciones por todo el país, presionando a los jueces, pero si son extranjeros (con o sin pasaporte) hay que mirar para otro lado. Me niego: lo mismo diría si fuera al reves. Si de verdad, esos que salieron cuando el tema de la manada de San Fermín fueran lo que dicen ser, saldrían a la calle, pero no lo hacen por intereses políticos o de otra indole que lleva a pensar que el movimiento feminista, noble hasta hace no poco, está siendo dirigido no sólo desde determinados partidos, sino desde algunos medios de comunicación y organizaciones de origen incierto.

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