Antes de nada decir que la unión matrimonial de Fernando II de Aragón e Isabel II de Castilla provocó la Unión de los dos Reinos (y por lo tanto la ansiada Unidad entre dos Estados tan poderosos de la Península Ibérica) no es del todo cierto. Ambos Reinos siguieron manteniendo sus Cortes, algo que respetaron los Habsburgo (los Austria) que debían prestar juramento en ambas y que fue rechazado por los Borbones, que prefirieron la centralización del Estado con una corte en Madrid al estilo de Francia. Lo que si es cierto es que mientras Fernando II era consorte de Castilla, Isabel I lo era de Aragón. Todo cambiaria en parte cuando el titular de ambos Reinos sería una sola persona, tras la muerte de Fernando de Aragón.
Fernando accedió al Trono de Aragón, así como obtuvo otros títulos hereditarios como el de Conde de Barcelona, tras la muerte de su padre, Juan II, e Isabel I accedió al Trono de Castilla, tras la guerra de sucesión castellana. Inicialmente Fernando e Isabel tuvieron problemas para casarse debido a su parentesco (eran primos) por lo que necesitaron de una bula papal que tardó muchisimo en llegar. Desde el poder terrenal y eclesiástico se temía que dos grandes Reinos pudieran en algún momento unirse bajo la misma persona.
Durante la época de Isabel y Fernando se acabó con el periodo que se dio en llamar Reconquista y que unía todos los Reinos de la Península Ibérica bajo la Cristiandad. Esto se conseguiría con la toma de Granada de 1492, año en el que merced muy especialmente a Isabel I, Cristobal Colón llegaría al continente Americano abriendo al transito comercial a un nuevo rumbo en el que Castilla llevaría la voz cantante. En 1496 se terminaría con la conquista de las Islas Canarias iniciado hacía casí un siglo. Por otro lado, la zona de influencia de Aragón sería el Mediterráneo, muy especialmente la Península Itálica.
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Entega de las llaves de Granada |
Lo que podemos decir de ambos Reyes es que fueron garantes de la Cristiandad, haciendo que, tras la toma de Granada, los musulmanes que querían quedarse tuvieran que convertirse al Cristianismo (los moriscos), aunque muchos también se fueron en lo que fue un error económico importante dado que muchos campos se quedaron sin dueño, perdiéndose infinidad de cosechas. Sería el Papa Borgia, Alejando VI el que les daría el título de Católicos en la bula Inter caetera, llamándolos "verdaderos reyes y príncipes católicos". El título de "Reyes Católicos" fue nuevamente reconocido por el mismo
Alejandro VI a favor de los Reyes en la bula Si convenit.
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Alejandro VI |
Este título lo herederaría a partir de ese momento todos y cada uno de los Reyes descendientes de Isabel y Fernando. Así uno de los títulos del actual Rey de España es el de "Majestad Católica". Sería bajo el Reinado de Isabel y Fernando cuando se constituiría la Inquisición, destinada a preservar la Unidad Católica de los Reinos hasta el punto de ir contra todo aquel que fuera acusado de practicas judaizantes o de no haber abandonado la religión mahometana. Su implantación en Castilla sería inmediata, mientras en Aragón tardó un poco más.
La heráldica de los Reyes por no dejar de ser conocida, no deja de ser desconocida (aunque resulte paradójico), ya que genera cierta controversia debido a que la Falange y el régimen de Franco utilizaron tales símbolos. Fernando tuvo como emblema personal un yugo, con una cuerda suelta y el mote heráldico "tanto monta", en referencia al nudo gordiano que, según la tradición, cortó Alejandro Magno (
Leyenda). Isabel tomó como emblema el haz de flechas,
que se representaba atado o suelto o con unas flechas
paralelas en número variable. Cada una de estas divisas homenajeaba con
su inicial al consorte: "F" de Fernando en las flechas de Isabel, e "Y"
de Isabel (con la grafía de la época, Ysabel) en el yugo fernandino.
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La Virgen de los Reyes Católicos |
Por otra parte, hay que recordar que San Juan fue uno de los evangelistas más tenidos en cuenta en España y muchos fueron los Reyes los que utilizaron su símbolo, el águila. El águila de San Juan o de Patmos (siguiendo la creencia de que Juan el Evangelista es el mismo que estuvo desterrado en Patmos, escribiendo el Apocalipsis) fue utilizado primeramente por Isabel siendo aún Princesa en 1473. El águila aparecía sin corona debido a que aún no había sido
coronada como Reina de Castilla, suceso que tendría lugar en Segovia. Posteriormente fue incorporada a las armas combinadas de ambos, ya con la corona, claro.
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Aguila de San Juan junto al yugo y las flechas |
En cuanto a su política de pactos entre potencias siguieron la tradición utilizada por muchos Reyes del momento que era casar a sus hijas con Reyes o herederos. Así, por ejemplo, Catalina se casó con el Príncipe heredero de la Corona de Inglaterra, Arturo Tudor y tras la prematura muerte de éste, con su hermano menor, el que sería el Rey Enrique VIII de Inglaterra y Juana se casó con el apodado Felipe el hermoso, hijo y heredero del Emperador Maximiliano I.
Tras la muerte de Isabel, Fernando tendría bastantes encontronazos con su yerno Felipe, esposo de Juana, dada las intromisiones de éste, mientras se vería que la propia Juana iba perdiendo poco a poco la razón, algo que se acrecentó con la inesperada muerte de su esposo. Sería el propio Fernando, que se había casado con Germana de Foix (sobrina del rey Luis XII), el que incapacitaría a su hija, haciendo que fuera internada en Tordesillas.
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Muerte de Isabel de Castilla |
Fernando murió en 1516, siendo enterrado junto a su esposa en la bella Granada. Ese mismo año un joven Príncipe llegaba a la Península Ibérica. Apenás balbuceaba algunas palabras en castellano y se había criado en las Cortes Europeas. En los hombros de ese joven, que tenía tan solo 16 años (un niño en aspectos legales) se centralizaría el poder no sólo de Castilla y Aragón, sino del mundo.
Con ese joven Príncipe, de mentón hacía fuera (muy propio de su familia paterna, por cierto) y aparentemente gran carisma, comenzaría una nueva historia. La época de Isabel y Fernando había terminado; comenzaba la época de Carlos, que sería Rey de Castilla y Aragón por línea materna, y posteriormente Emperador por línea paterna. Esa sería la época de Carlos I de España y V de Alemania.