Ver el debate de los candidatos a Secretario General del PSOE ya es un acto bastante osado, pero si encima tienes que oir las misma cantidad de sandeces multiplicadas por tres.. con matices, claro. Porque sólo uno dice que lo echaron, mientras la otra saca un pecho que no debería sacar (Mejor no hablemos de Andalucia después de más de 40 años socialista), mientras el otro tan moderado y centrado, no tiene reparos (años ha) de asumir todas las ideas de ese fracaso llamado Sánchez. Al menos les une su odio al PP y que se atreven a dar lecciones de políticas de empleo cuando ninguno de ellos (que se sepa) ha trabajado en otra cosa que no sea el partido.
En un párrafo he resumido la cantidad de despropósitos en la que es la historia de una muerte lenta, que no es otra que la del PSOE a manos del radicalismo, auspiciada no por Sánchez, sino por un señor que hizo de la ceja su identidad y su odio a la derecha su bandera.
Así pasa como el socialismo español (con el cual no coincido, pero que es indispensable para la Democracia) ha asumido las tesis revolucionarias, olvidadas hace más de 70 años. Parece como si algunosvbuscaran sacar de su tumba a Largo Caballero, dispuesto a hacer revoluciones por su cuenta y a mentar lo mala, malisima que es la derecha, despreciable por supuesto (o toxica como diría Susana), uniéndose al rancio comunismo de siempre. Sigan así que en lugar de ser un partido de Estado, serán un partido de militantes (si no lo son ya) y radicales.
PD: Todavía me estoy preguntando qué es eso de una "Nación cultural".
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