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domingo, 16 de octubre de 2016

¡Cuidado con Annabelle!

Raggedy Ann fue una serie una empresa creada en 1915 por Johnny Gruelle, que comerció una serie de muñecas reconocidisimas, dandose a conocer tras una saga literaria infantil a partir de 1918, teniendo incluso una serie animada elaborada por la mítica Fleischer Studios. Una de esas muñecas tiene una curiosa historia que la mete de lleno dentro de los fenómenos aparentemente extraños... y que aún no se han resuelto. 


En 1970, una mujer le regaló a su hija Donna, estudiante de enfermería y que compartía habitación con otra joven, Angie, una muñeca de esas muñecas. Contenta con el regalo, lo primero que Donna hace es dejar a la muñeca sobre su cama como adorno. A los pocos días comenzaran a suceder fenomenos extraños. La muñeca parece moverse sola, ya que cuando las dos regresan al apartamento, se la encuentran en diferentes posturas, aparte (y de ahí lo que las asustó) de hallar mensajes aparentemente sin sentido tales como "Help us" ("Ayúdanos"), "You miss me?" ("¿Me echas de menos?" ) o "Save Lou" ("Salven a Lou"), como se llamaba el novio de Donna.


"Será una broma se decían las jóvenes", pensando que sería un estudiante que se escondía para asustarlas, ignorando los sucesos, pero dichos fenómenos irán en aumento hasta hacer que las dos chicas se obsesionen con la muñeca. De esta forma piden los servicios de una médium, la cual les dice que dentro de la muñeca está alojado el espíritu de una niña llamada Annabelle Higgins, una niña que había sido asesinada en el sitio de la casa en un terreno baldío donde ella jugaba. la cual les pide que la acepten como una más. Lou (el mencionado novio de Donna) se asombrara como su novia y Angie la tratan como si fuera humana y de hecho aparentemente le llegan a tomar cariño. Al poco tiempo, Lou tendrá una pesadilla en la que alguien pretende estrangularle, despertándose para encontrar a la muñeca a los pies de la cama y él con unas heridas superficiales. 
Tanto las estudiantes como Lou escuchan ruidos desde su habitación, pero no encuentran a nadie (solo se encuentra Annabelle), por lo cual deciden contactar con un cura, que contactas con el famoso matrimonio de parapsicólogos: Ed y Lorraine Warren, que les comentan que no existe la tal Annabelle, sino que dentro de dicha muñeca mora un espíritu maligno que pretende poseer a Donna tras haberle dado permiso para que entrara en su vida, acabando con todo que se encuentre relacionado con ella como su novio Lou. 

Lorraine y Ed Warren

Finalmente optan por deshacerse de la muñeca. Los Warren regresan a su casa por carreteras secundarias con el objetivo de evitar posibles accidentes a causa del poder maligno que tiene la mueca, poniéndola en una urna de cristal del museo particular que tienen en Connecticut con el siguiente aviso: "Advertencia: no abrir". Desde ese momento ha permanecido allí sin mostrar algún signo extraño... hasta ahora.

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