El enigma Nessie

La más antigua referencia a un ser presente en el lago Ness la encontramos en la "Vida de san Columba", escrito compuesto en el Siglo VII. En él se describe que en el año 565 San Columba (521-597) habría salvado a alguien que supuestamente estaba siendo atacado por un animal en el lago.  La credibilidad de esta historia, que buscaba resaltar la capacidad del Santo para poner bajo control a las bestias, es bastante escasa como muchas de aquella época. Sin embargo, parece que algo de esta tradición quedo en nuestros ancestros y así, ya en en pleno Siglo XX, se utilizo un prodigioso invento como la fotografía para captar supuestas imágenes del monstruo. 

La idea más común en torno a su figura es que era un plesiosaurio, dada su característica acuática, así como su largo cuello, según los supuestos testigos. Quizá es junto con el Pie Grande y el Yeti, uno de los misterios más difundido de la criptozoología. Las fotografías del monstruo fueron tomadas como patraña por involucrados en el caso. La idea es que, aprovechando las leyendas antiguas, así como la tradición oral, crear un "monstruo", que en realidad era un montaje de arcilla pegada a un submarino de juguete.

No obstante, la idea caló tanto en la gente que, en base a supuestos avistamientos del monstruo (que según la tradición local no sería más que un dinosaurio superviviente), se hicieron diferentes investigaciones y con ello surgieron posibles imágenes de la cola del mismo animal. Incluso, muchos aseguran que puede haber más de un monstruo y que, al tener el lago una salida al mar, éstos pueden no vivir exclusivamente en el propio lago Ness, generando leyendas en torno a los clásicos monstruos marinos de la antigüedad. La falta de pruebas 100% confirmadas hace que el enigma no haya sido resuelto.

Independientemente de estas circunstancias, lo cierto es que los comerciantes han hecho un verdadero negocio en torno a la mítica figura del monstruo (al que llaman cariñosamente Nessie) y es que, ya que no se ha descubierto su existencia, por lo menos algunos se buscan el jornal gracias a unos turistas, que sueñan con ver salir algo de ese monumental lago Ness.