Genios de la Literatura: Marqués de Sade

Mucho se habla en la actualidad de la literatura erótica de las que alguna obra se han adaptado a los cines recientemente. Sin embargo, sería un hombre el que hace más de 200 años sortearía la barrera de la sociedad con lo profano hasta el punto de que su título, Marqués de Sade, inspiró la palabra que da nombre al momento en el que una persona obtiene placer al ser dominado o maltratado durante el acto sexual: sadomasoquismo.

Donatien Alphonse François de Sade nació el 2 de Junio de 1740 en París, Francia, cocretamente en el Hôtel de Condé, palacio de los príncipes de Condé, y allí pasará los primeros años de su infancia, pues su madre es dama de compañía de la Princesa.

Cuando cuenta 4 años de edad, se ven obligados a viajar constantemente debido a que su padre era diplomatico. Ya con 10 años volvería a París y 4 años después ingresaría en la Academia Militar y unos años después, accede, con el grado de subteniente honorario, al Regimiento de Caballería Ligera de la Guardia del Rey (École des Chevaux-légers), pasando a formar parte de la élite del ejército francés. Al año siguiente es nombrado segundo teniente en el Regimiento Real de Infantería. Participaría en la guerra de los 7 años contra Prusia. 

Tras la firma de la tregua, su padre había concertado un matrimonio de conveniencia para él con la hija mayor de los Montreuil, pero Donatien estaba enamorado de otra joven, que, a pesar de estar igualmente enamorada de Sade, accede a la imposición paterna de casarse con otro joven. Finalmente, Sade se acaba casando en 1763 con Renèe-Pélagie Cordier de Launay de Montreuil, instalandose en el Castillo de Échaffars, en Normandía. Tuvieron tres hijos. 

Retrato del Marqués cuando tenía unos 20 años

Sin embargo, el matrimonio no fue feliz. Sade fue arrestado varias veces por su libertinaje y recurrió en más de una ocasión a la labor de las prostitutas. Eso llevo a muchisimos escándalos dentro de la corte. En 1767 murió su padre, por lo que Donatien, que tenía 27 años, heredó varios feudos, así como el título de Conde de Sade. Sin embargo, siguió utilizando su título de Marqués como era costumbre en la familia, que utilizaba uno y otro título alternativamente de generación en generación.

Un escandalo acaecido el Domingo de Pascua de de 1768 en el que una prostituta lo acusó de, mediante engaños, atraerla y flagelarla, lo llevo a un nuevo encarcelamiento del que salio un tiempo después, obligando al traslado de la familia.

En Holanda publica un manuscrito y siguieron los escándalos allá por donde iba. En el verano de 1772, tiene lugar el denominado caso de Marsella. Sade, tras un encuentro con varias prostitutas, es acusado de haberlas envenenado con la supuestamente afrodisíaca mosca española. Tras un día de orgía, dos de las ellas sufrieron una indisposición que remitió pasados unos días. No obstante, fue sentenciado a muerte por sodomía y envenenamiento, y ejecutado en efigie.

La amenaza de arresto siempre planeó por su cabeza hasta el punto de que su suegra, su enemiga más encarnizada, no paró hasta verlo encerrado, algo que paso definitivamente, siendo llevado a la fortaleza de Vincennes. En 1784 sería trasladado a la Bastilla.

Durante su encierro en la Bastilla

Sade comenzaría a escribir sus obras en el largo encierro en la Bastilla. Obras como "Los crímenes del amor", "Aline y Valcour" y tantas otras, siendole atribuidas algunas como "Justine o los infortunios de la virtud", "Juliette o las prosperidades del vicio", "Las 120 jornadas de Sodoma" y "La filosofía en el tocador". Dichas obras fueron en muchos casos prohibidas y condenadas por la propio Iglesia Católica, que las califico de inmorales. Y es que en sus creaciones eran habituales los antihéroes y los protagonistas de violaciones. La expresión de un ateísmo radical, además de la descripción de parafilias y actos de violencia con sumo detalle. La idea era la del triunfo del vicio sobre la virtud, algo muy poco habitual a lo largo de la historia de la literatura.

Sade es trasladado al manicomio de Charenton, poco antes de que la Bastilla, donde apenas habían presos, fuera tomada, tras iniciarse la revolución con el derrocamiento del Rey y con muchos nobles en peligro por su su defensa del antiguo régimen. El propio Sade llego a estar en los papeles que pedían que su cabeza fuera una de las muchas que pasaran por un invento atroz de ajusticiamiento: la guillotina. 

Sin embargo, Sade, experto en escaparse de la justicia, no conseguirá no ser hallado, pasando los últimos días de su vida con Constance Quesnet, actriz de cuarenta años de edad, con un hijo, a la que había abandonado su marido. 

Tras un cierto "relajamiento" de la revolución, Sade participara de forma activa en los procesos ciudadanos, aunque no será por mucho tiempo. Sus obras para teatro serían estrenadas no sin cierta polémica por parte del público asistente. Napoleón Bonaparte que se alzaría como salvador de Francia, tras la revolución (siendose elegido como Emperador) diría de su novela "Justine": "Es el libro más abominable jamás engendrado por la imaginación más depravada".

Napoleón Bonaparte arrojando a las llamas la novela "Justine"

Sade falleció el 2 de Diciembre de 1814 en Charenton-Saint-Maurice, Francia. Un hombre polémico tanto por su estilo de vida como por su obra que pasa por ser una de las imprescindibles de la literatura erótica, un género inexplorado por aquel entonces. 

Un estilo de vida que le valió varios encierros, que le llevaron a pasar largas temporadas entre rejas, pero ya lo decía el propio Marques: "Los entreactos de mi vida han sido demasiado largos".

Su vida y obra se pueden consultar en: Marqués de Sade-Wikipedia