Menos aforados

Ruiz-Gallardón (a veces nos olvidamos que es un apellido compuesto) es el típico que lanza una noticia (en su periódico de cabecera "El País") como la reducción de aforados, pero rara vez actúa de la forma tajante que se requiere en un responsable público.

Me temo que las palabras de Ruiz-Gallardón van a quedar en una especie de globo sonda y no se van a traducir en la necesaria reducción del "privilegio" de ser juzgado por el Tribunal Supremo a diferencia del resto de ciudadanos. La supuesta idea del Ministro de Justicia es reducir el número a 22, algo que requeriría no sólo un cambio de la Constitución, sino que todos y cada uno de los partidos se pusieran de acuerdo y es que en este país hay más de 17.000 aforados, cantidad demencial y tan insostenible como la cantidad de coches oficiales. 

La idea no estaría mal, sí determinadas personas no buscaran la reforma constitucional para hacer "sus"cambios particulares o el señor Ruiz-Gallardón se dignara a cumplir algo de lo que dice y se dedicara menos a anunciar sus deseos en su medio de comunicación de cabecera. Pero esto es España y aquí cada uno, sea de la ideología que sea, va a lo suyo. Estamos en el país donde hay más paro, hay más corrupción, hay más subvenciones innecesarias, la justicia es muy lenta y desigual y, donde un ex-presidente autonómico (un tal Pujol, no se sí lo conocen) se pasea como Pedro por su casa cuando ha reconocido que tiene dinero en un paraíso fiscal desde hace más de 30 años. Así nos va de bien.