El retiro dorado de Jerónimo Saavedra

De entre todas las administraciones absurdas que existen en España y que sólo sirven para que algunos vivan muy bien esta el defensor del pueblo. Hasta diecisiete tenemos en España (por las comunidades autónomas) elegidas por parlamentos que eligen a esas personas no porque estén cualificados para tal ocupación, sino por temas meramente políticos.

Un caso paradigmático es el del defensor del pueblo canario (denominado aquí Diputado del Común), Jerónimo Saavedra, un tipo "desconocido" y "cualificado" para tal cargo (nótese mi ironía). Un señor que ha sido de todo menos Presidente de España (alcalde, presidente autonómico, ministro), en fin una persona que no es que llegue de nuevas a la política, sino que ha vivido de la política en todo este periodo que va desde la transición ahora. Yo tuve la oportunidad de ver al susodicho, al igual que a determinadas personas nada recomendables, que desgraciadamente son nuestros dirigentes, como se ponían las botas y reflejaban su contento por que una persona como Saavedra fuera defensor del pueblo.

 

No sabemos cuál es la actividad de Saavedra en este puesto. Lo que si podemos saber es que no ha escogido mejor sitio para retirarse y vivir la vida, sin que nadie le pida cuentas de nada. A él nadie lo eligió (yo, al menos no). Sino aquellos a los que determinadas personas han elegido como nuestros representantes, mediante un sistema electoral que beneficia a los de siempre para que los de siempre estén en los mismos puestos hagan o no hagan algo por sus ciudadanos.

La Democracia tiene mecanismos (o los debería tener) para que el ciudadano canalice su frustración debido a unos dirigentes incompetentes que se eligen entre ellos para ocupar puestos que debería elegir la ciudadania. Mientras tanto, ellos llenándose los bolsillos y viviendo del cuento durante los años que haga falta como Jerónimo Saavedra que se ve que no ha tenido suficiente con ser de todo que, encima, es "elegido" defensor del pueblo con residencia en la bella isla de la Palma. Un cargo inútil, donde ellos eligen a gente más inútil todavía. Mientras tanto esperemos que Saavedra algún día sepa para que funciona ese cargo porque de momento ha hecho más bien poco.