Páginas

miércoles, 8 de mayo de 2013

Genios de la Literatura: Mark Twain

Uno de los escritores más carismaticos de la literatura estadounidense, que supo captar los matices de su época, desde un punto de vista cercano a la población rural. Nacido como Samuel Langhorne Clemens en Florida, Misuri, el 30 de noviembre de 1835. Creció en Hannibal, lugar donde ambientaría las aventuras de Tom Sawyer y Huckleberry Finn. Era el sexto de siete hermanos, pero sólo tres de ellos sobrevivieron a la infancia. Su padre, además, murió de neumonia cuando el joven Samuel apenas contaba con 11 años.


Dejó el colegio de forma prematura y al año siguiente comenzó a trabajar como aprendiz de impresor en un periódico local. Esa sería su incursión dentro del mundo del periodismo. En 1851 llegó a ser tipógrafo y comenzó a publicar algunos bosquejos humorísticos y breves relatos de viajes en el Hannibal Journal, periódico propiedad de su hermano mayor, Orion. Durante sus viajes en Nueva Orleans comenzó sus primeros relatos. En 1861 su hermano fue nombrado secretario de James W. Nye, gobernador del Territorio de Nevada, y se dirigieron hacia el Oeste. Ambos viajaron durante más de dos semanas en una diligencia a través de las Grandes Llanuras y las Montañas Rocosas, visitando la comunidad mormona de Salt Lake City por el camino. Este viaje le sirvió como inspiración para una de sus primeras grandes novelas Pasando fatigas. En 1864 se trasladó a San Francisco, California, donde conoció a diferentes periodistas de prestigio. Su primer éxito como escritor llegó cuando publico La célebre rana saltadora del distrito de Calaveras en un semanario neoyorquino, The Saturday Press, el 18 de noviembre de 1865. Su contenido de carácter humoristico resultó un éxito inmediato, que le dio reconocimiento a nivel nacional. 
Durante un viaje por el Mediterráneo (donde compilo una serie de cartas escritas por el mismo, que tituló Los inocentes en el extranjero), conoció Charles Langdon, el cual le presento a su hermana Olivia, con la que Twain se casó en 1870, después de que esta en un principio rechazara su propuesta de matrimonio. La familia de Olivia provenía de una familia rica pero liberal, y a través de ella Twain conoció a abolicionistas, socialistas, ateos por principios y activistas por los derechos de las mujeres y la igualdad social. Éstos grupos sociales influirían notablemente en sus obras. 

Las aventuras de Tom Sawyer, una de sus obras más recordadas

Durante las década 70 y 80, Twain y su esposa pasaban gran parte de los veranos en Elmira, en la casa de los padres de ella, donde se habilitó un estudió donde Twain pudo dar rienda suelta a sus creaciones. De esa época datan obras tan maravillosas como Las aventuras de Tom Sawyer (1876), El príncipe y el mendigo (1881), Vida en el Misisipi (1883), Las aventuras de Huckleberry Finn (1885) y Un yanqui en la corte del Rey Arturo (1889). A pesar del éxito arrollador de estas obras, siempre tuvo problemas financieros debido a malas inversiones, sobre todo en el aspecto tecnológico y científico, algo por lo que siempre tuvo gran interés y que llevo a entablar una gran amistad con Nicola Tesla, promotor del nacimiento de la electricidad a nivel comercial. Fruto de su interés por la ciencia nació Un yanqui en la corte del Rey Arturo donde podemos ver como una persona contemporánea viaja a la época del Rey Arturo.

En un Yanqui en la Corte del Rey Arturo, Twain nos hace participe de un viaje en el tiempo

Sus últimos años vivio en la constante depresión y, de hecho, no ayudo que una de sus hijas muriera de meningitis. Su esposa también enfermo y les recomendaron que vivieran en sitios más cálidos. En 1904, su esposa falleció de un paro cardiaco. 
No obstante, todavía le quedo una alegría y fue el reconocimiento de sus semejantes. En 1907 recibió el título de doctor honoris causa por la Universidad de Oxford (Reino Unido). La ceremonia de entrega se contó con un gran número de altas personalidades.

Doctor Honoris Causa

Tres años después murió murió en Redding (Connecticut) de un ataque al corazón sobre las 6 de la tarde del 21 de abril de 1910, a los 74 años de edad, cumpliendose una "predicción que el mismo había dicho en la gala por el honoris causa:

 Vine al mundo con el cometa Halley en 1835. Vuelve de nuevo el próximo año, y espero marcharme con él. Será la mayor desilusión de mi vida si no me voy con el cometa Halley. El Todopoderoso ha dicho, sin duda: 'Ahora están aquí estos dos fenómenos inexplicables; vinieron juntos, juntos deben partir'. ¡Ah! Lo espero con impaciencia.

Efectivamente falleció el día antes de que se volviera a avistar. Moría un amante de la literatura, la profesión a la que el siempre quiso.
Su vida y obra se pueden consultar en: Mark Twain - Wikipedia

No hay comentarios:

Publicar un comentario